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¿UN SEGUNDO FRENTE POPULAR?


La unión de Podemos con IU ha dado mucho de qué hablar estos días. Sin embargo, esta alianza apenas extraña a los periodistas, pues los dos partidos arrastran ideologías parecidas, exceptuando algunas pequeñas diferencias. Esta nueva unión podría acarrear problemas y ventajas para las próximas elecciones generales de junio.


Tras el enlace de estos dos partidos, algunos dirigentes piensan que van a obtener más votos, pues se sumarían los votantes de IU a los de Podemos. Pero Pablo Iglesias no se conforma con eso y quiere unir a todas las fuerzas de izquierda para crear un “Frente Popular”, igualito al de la II República, con suficientes votos para ganar las elecciones. Algunos contemplan su objetivo como algo irrealizable, por el contrario, yo veo la unión de todos los partidos de izquierdas como algo probable, y me explico.


Para que se diera un segundo Frente Popular, el PSOE debería unirse a esta coalición. Y aunque el PSOE ha dejado de ser un partido tan radicalizado como lo era en aquellos tiempos, desconocemos lo que piensa el señor Sánchez sobre este tema, así que todo estaría en sus manos. Además, hay socialistas a los que les gustaría ver otro frente popular, y no pondrían ninguna objeción a la unión.


Dejando aparte la unión con el PSOE, cabe la posibilidad de que Unidos Podemos pierda votos respecto al 20D. Esto se produciría por varias razones:


En primer lugar, hay personas dentro de IU que ven a Podemos como un partido extremista, y a la inversa. Pero este no es, bajo mi punto de vista, el principal motivo de discordia entre los simpatizantes de las dos formaciones políticas. La principal fuga de votos de IU se daría por la desconfianza que sienten los votantes de Alberto Garzón hacia Pablo Iglesias. Éste último ha propuesto en varias ocasiones nombrar vicepresidente a Pedro Sánchez, lo que supondría una traición a Garzón, y por ende a IU. Además, muchos simpatizantes de IU temen depender excesivamente de la formación morada.


En segundo lugar, IU apenas obtuvo dos escaños en las pasadas elecciones. Este desastre electoral puede hacer que algunos de sus votantes cambien la papeleta. A todo esto hay que añadirle el descontento de muchos admiradores de Pablo Iglesias, que consideran que Podemos se ha comportado de una manera indigna en los últimos meses. Por último, hay personas que votarían al PSOE directamente para garantizar que gane un partido de izquierdas.


En definitiva, no veo tan claramente los beneficios de esta coalición. A lo mejor alguien tiene que mirar las cuentas además de sus “pactos de futuro”.

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