ENTREVISTA A EMILIO GIL: "UN SOLO LIBRO PUEDE CAMBIAR EL MUNDO"
Hoy entrevistamos a Emilio Gil, un prestigioso diseñador gráfico y teórico del diseño. En 1980 fundó la empresa Tau diseño, una empresa pionera y vanguardista en este campo. Ha recibido numerosos galardones, entre los que se cuentan el prestigioso Laus de Oro o la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes. Este año se ha encargado de diseñar el cartel gráfico de la Feria del Libro.
- Pregunta: ¿Cuál es su principal fuente de inspiración a la hora de trabajar?
- Respuesta: Partiendo de la base de que entiendo el diseño gráfico como un proceso de transmisión de información con una solución formal adecuada, creo que mis principales fuentes de inspiración son las propias condiciones del proyecto. Considero que el diseño -en mi caso el diseño gráfico- es la respuesta a unos requerimientos de comunicación y en esos condicionantes está la información y lo que se llama en términos generales la inspiración. Esta forma de entender el proceso se relaciona con mi concepción general del diseño como una actividad que da respuestas ajustadas a las necesidades y no a la inspiración libre de un artista. Como dice el teórico argentino-canadiense Jorge Frascara: “El diseñador a diferencia del artista, no es normalmente la fuente de los mensajes que comunica sino su intérprete"
- P: El mundo de las artes gráficas, ¿se encuentra en peligro de muerte?
- R: No estoy seguro de que mi opinión sea la más acertada. Soy consecuencia de mi trayectoria y ésta ha estado ligada al mundo de lo físico, de lo analógico. No quiero confundir mis deseos con la realidad pero me gustaría pensar que las artes gráficas no van a desaparecer. Tal vez algo tan cotidiano ahora como es la impresión digital bajo demanda alargue este proceso -¿inevitable?- de desaparición.
- P: ¿Cuál es el papel que deben jugar los libros en una sociedad como la nuestra?
- R: Si te refieres al libro físico en su pelea por sobrevivir con respecto al libro digital, estoy de acuerdo con la diseñadora editorial Imma Boom cuando dice que “solo merecerá la pena imprimir y cuidar lo que realmente aporte”.
Si me preguntas por el libro en sentido general creo que el libro es un objeto creado por el hombre difícilmente superable. La expresión de lo mejor que puede conseguir el ser humano. El contenedor de todo. La capacidad de cambiar el mundo. Y como diseñador un ejercicio y un reto que nace inédito cada vez que te enfrentas a él.
- P: ¿Qué supone para usted diseñar la imagen gráfica de la feria del libro?
- R: La Feria del libro de Madrid ha llegado a su edición 75. Gran parte de la experiencia humana funciona a base de capas o niveles. La Feria tiene 75 capas. Año tras año se han ido superponiendo, de forma secuenciada y, en parte, aleatoriamente capas, estratos, niveles relacionados todos ellos con lo que conocemos como la cultura.
Como afirma el artista británico David Hockney, “entendemos el presente comparándolo con el pasado añadiendo una capa sobre otra”. Creo que la metáfora visual más próxima a esa forma de crecimiento es una imagen construida con la técnica del “collage”, añadiendo, encajando “piezas” con un origen anterior y que, al igual que el trabajo de creación en la escritura, nacen unas de otras ajustándose a lo que ya existía anteriormente.
El cartel de la 75 edición de la Feria del Libro de Madrid es un collage en el que se ha buscado ensamblar piezas que remiten al inicio de la lectura y la escritura por parte del niño, futuro lector, las técnicas de impresión, el trabajo de los diseñadores que conforman ese artefacto al que llamamos libro y el porvenir de éste.
Lo físico, lo táctil, aquello que experimentamos también desde varios niveles y sentidos está aquí integrado, encajado y orgulloso de su materialidad. ¡Larga vida al libro!